La Distribución de la Población, Agricultura e Industria en la Villa de Albox a traves de los cuestionarios
La Distribución de la Población, Agricultura e Industria en la Villa de Albox a traves de los cuestionarios
Cuestionario del Catastro del Marques de la Ensenada 1752
Compartimos un importante documento de gran valor histórico y documental, del fondo documental de archivos españoles del Ministerio de Cultura.
Se trata de las respuestas al cuestionario del catastro del Marqués de la Ensenada, fechado en 1752, realizado en la Villa de Albox.
Este cuestionario, compuesto por 40 preguntas, fue distribuido a todos los municipios de la Corona de Castilla durante el reinado de Fernando VI. La intención era reformar el complejo e injusto sistema tributario de la época mediante la imposición de un impuesto único, dirento y proporcional a los ingresos de cada individuo.
Aunque el objetivo principal no se logró debido a las circunstancias, el proceso permitió recopilar una valiosa documentación que ofrece una visión detallada de la economía, la sociedad, el sistema señorial y hasta el estado del medio ambiente. Este documento puede considerarse como la encuesta más antigua y completa disponible sobre los pueblos de la Corona de Castilla
Cuestionario del Catastro del Marques de la Ensenada
Respuestas al Cuestionario del Marques de la Ensenada de la Villa de Albox
Los interrogatorios de 1802
Durante los últimos años del reinado de Carlos IV, una figura destacada fue la de Miguel Cayetano Soler, originario de Mallorca, quien se desempeñó como Superintendente General de Hacienda de España e Indias a partir de mayo de 1787.
Soler era un ministro preocupado por la estadística y en 1800 fundó la Secretaría de Hacienda, la cual se dividió en tres secciones. Cada una tenía la tarea de recopilar información sobre un sector específico de la economía nacional. Una sección se encargaba de la Hacienda, otra de la población y una tercera de la agricultura, comercio e industria.
Sin embargo, poco después, el 26 de marzo de 1800, se emitió una Real Instrucción que generó un cuestionario de 40 preguntas para interrogar a los pueblos sobre el estado de su población, industria y comercio. Este cuestionario resultó ser un fracaso debido a la ambigüedad en la redacción de las preguntas, lo que obligó a Soler a revisarlo.
En resumen, gracias a este conjunto de cuestionarios, la Monarquía buscaba obtener información valiosa sobre la situación económica y demográfica de todos los pueblos de España.
Una de las principales ventajas de estos cuestionarios en comparación con sus predecesores, como el Catastro de Ensenada y los censos de Floridablanca (1787) y Godoy (1797), es que nos permiten conocer el porcentaje de tierra amortizada y vinculada en la corona de Castilla.
A diferencia de los censos anteriores, que se centraban en clasificaciones de tipo personal como el número de labradores, jornaleros y arrendatarios, estos cuestionarios políticos de agricultura proporcionan información más detallada sobre cómo se distribuye la superficie cultivada entre estos sectores.
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